Si tienes una caja flamenca, es importante que tomes medidas para protegerla adecuadamente y mantenerla en buen estado durante mucho tiempo. A continuación, te ofrecemos algunos consejos sobre cómo cuidar y proteger tu caja flamenca:
Jamás lo dejes en el maletero de tu coche al sol: la madera es muy sensible a los cambios de temperatura por que se estira con los cambios. Un dia de verano en el maletero de tu coche puede matar el sonido de tu cajón para siempre. Ten cuidado con eso.
Mantenla alejada de la humedad: La humedad es uno de los mayores enemigos de cualquier instrumento musical, y las cajas flamencas no son una excepción. Trata de mantener tu cajon flamenco en un lugar seco y fresco para evitar que se deteriore.
Usando una funda o estuche para transportarla. Asegúrate de que la funda esté acolchada para ofrecer la máxima protección contra golpes y caídas. Una funda demasiado básica no lo va a proteger de un golpe y por ser barata puede terminar saliendo muy cara...
Limpia tu cajon flamenco regularmente: Es importante mantener tu caja flamenca limpia y libre de polvo. Puedes limpiar la superficie con un paño suave y seco. También puedes usar un paño ligeramente humedecido con agua si es necesario, pero asegúrate de no mojar demasiado la madera.
Ajusta las cuerdas con cuidado: Si necesitas ajustar las cuerdas de tu caja flamenca, hazlo con cuidado y lentamente. Asegúrate de no estirarlas demasiado para evitar que se rompan.
Cambia las cuerdas regularmente: Las cuerdas de una caja flamenca se desgastan con el tiempo y el uso. Cambia las cuerdas regularmente para mantener el mejor sonido posible y evitar roturas inesperadas durante una presentación.
Evita el contacto con objetos afilados: Evita golpear tu caja flamenca contra objetos afilados o duros, como paredes o esquinas de muebles, ya que esto puede causar rasguños y daños en la superficie.
Trata la madera con aceite de linaza: Si quieres mantener la madera de tu caja flamenca en buen estado, puedes tratarla con aceite de linaza. El aceite de linaza protege la madera contra la humedad y la sequedad, y puede ayudar a mantener su brillo natural.
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